La revistería Piturro de Posadas se ha reinventado ante la era digital y la pandemia, adaptándose a las nuevas necesidades de sus clientes. Su dueño, Sergio Barrios, contó para Canal 12 las estrategias que encara su negocio para persistir en la era digital en una sociedad posadeña que no deja de leer.
La emblemática Revistería Piturro del centro de Posadas, que está por cumplir 35 años, ha logrado mantenerse en pie y adaptarse a los tiempos cambiantes. Inclusive ha enfrentado desafíos como la pandemia, y la era de la digitalización. Sergio Barrios, dueño del kiosko, comentó cómo ha sido este proceso de transformación para un negocio que ha sobrevivido en un entorno cada vez más digital.
“Es todo un combo, que nos hizo reinventarnos. Con lo que es el tema de la revistería, la tecnología, los celulares, el internet… Pero lo que tiene la sociedad posadeña es que no deja de leer”, afirmó Barrios. Dio cuenta que durante la pandemia, a pesar de que el local tuvo que cerrar sus puertas temporalmente, la tecnología se convirtió en un aliado crucial.
“La gente pedía revistas, libros, diarios, crucigramas, revistas para chicos, actividades… En un momento dado, la gente se cansó, esa es mi opinión, de la tecnología y volvió a la fuente, volvió a los libros, a las revistas, a leer algo que les hiciera pasar el tiempo y no pensar tanto en ese encierro”, resaltó.
Piturro se adaptó a los nuevos tiempos
Asimismo, el cambio en las demandas de los clientes también se ha reflejado en el tipo de productos que se venden. Sobre eso, Barrios precisó “ahora tenemos un caso puntual y extraño porque, después de tantos años de trabajo, cuando parece que uno vio todo, han lanzado un libro de literatura romántica, más que nada. Fue un boom en Buenos Aires, se agotó en todos lados, en todo el país. Y la gente viene a pedir estas lecturas acá en Posadas, lo que me alegra mucho, porque quiere decir que hay jóvenes, chicos, adolescentes, hasta de 30 años que todavía están interesados en leer”.

Igualmente, el dueño de la revistería comentó que el papel de los diarios impresos ha disminuido frente a la inmediatez de las noticias en línea, pero resaltó que aún hay quienes prefieren el formato tradicional. “Los diarios también tienen su punto débil porque la gente ya está con el celular viendo la información que sale al minuto. Pero igual hay gente que compra, porque lo que está escrito, está ahí. En las redes uno puede manejar, borrar, cambiar algún dato, pero lo que está en el diario queda. Todavía sigue siendo una fuente fiable de noticias que uno puede archivar o mostrar para alguna discusión o cuestión”, puntualizó.
Las estrategias para seguir en el mercado.
En cuanto a la estrategia para mantenerse competitivo, el kioskero señaló que la clave ha sido la constancia y la adaptación a las nuevas tecnologías. “La estrategia sigue siendo la misma desde que este kiosco está acá: las 24 horas todos los días, mañana, tarde, noche, madrugada. Salvo 5 días al año que son Navidad, Año Nuevo, Día del Trabajo, Viernes Santo y el Día del Canillita, después se trabaja todos los días”. Además, las redes sociales, que alguna vez fueron vistas como una amenaza, se han convertido en un aliado.
“Por ejemplo, en las redes, que parecían ser mi enemigo, ahora son mi aliado. Tienen el número del teléfono del kiosco, se comunican, me dicen ‘¿me podés traer un libro, una revista?’ Listo, yo te llevo, aunque sea a la madrugada, y después me pagás. También se pagan con billeteras virtuales”, declaró.
De este modo, a pesar de los cambios de hábitos en la actual era digital, Piturro se mantiene abierto las 24 horas del día, adaptándose a los cambios para mantener viva la pasión por la lectura de los posadeños.