La ONU exigió a Israel que termine la ocupación en Palestina en 12 meses. Además, el secretario general Guterres advirtió riesgo de escalada en Líbano tras explosiones atribuidas a Israel. Por su parte, desde Tel Aviv anunciaron una “nueva fase” en la guerra de Gaza y desplegó recursos en el Libano.
Este miércoles, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) aprobó por mayoría una resolución que exige el fin de la ocupación de los territorios palestinos por parte de Israel. Con 124 votos a favor y 14 en contra, además de 43 abstenciones, la resolución insta a Israel a retirarse en un plazo máximo de 12 meses. Aunque no vinculante, la resolución es histórica al haber sido presentada por el Estado de Palestina, que ha ganado nuevas competencias dentro del organismo en los últimos meses.
“Este es un paso significativo para nuestro pueblo. Ninguna potencia ocupante debería atentar contra nuestros derechos inalienables. La justicia es la única vía hacia la paz”, afirmó el embajador palestino ante la ONU, Riad Mansour. El texto de la resolución también exige la devolución de tierras confiscadas, el retorno de desplazados y reparaciones para los afectados. Además, la comunidad internacional es llamada a no reconocer las consecuencias territoriales, legales ni demográficas de la ocupación israelí.
En tanto, el embajador israelí en la Asamblea, Danny Danon, criticó duramente la resolución, señaló que “cualquiera que vote a favor estará colaborando con la violencia” y calificó el acto como “un circo donde se aplaude el terror”. Estados Unidos también se posicionó en contra. La embajadora Linda Thomas-Greenfield sostuvo que “la paz solo llegará mediante la negociación entre ambas partes”.
Explosiones en Líbano podrían llevar a una escalada

En otro foco de tensión en Medio Oriente, el secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió sobre un “grave riesgo” de escalada en Líbano. Sobre todo, tras las explosiones atribuidas a Israel, que han causado hasta ahora doce muertos y cerca de 3.000 heridos. Las detonaciones, que ocurrieron en el sur del país y en suburbios de Beirut, fueron atribuidas a miembros de la milicia chií Hezbolá, que sostiene un conflicto fronterizo con Israel desde que comenzó la guerra en Gaza en octubre.
“La lógica de explotar estos artefactos es hacerlo como un ataque preventivo antes de una operación militar importante, confirman el riesgo de una dramática escalada en Líbano que debemos evitar a toda costa“, expresó Guterres durante una conferencia de prensa en la sede de la ONU.
Hezbolá fue claro al vincular sus operaciones en Líbano con los sucesos en Gaza. Es más, indicó que cesarán sus acciones cuando haya un alto el fuego en el enclave palestino. Hasta el momento, el conflicto provocó la muerte de más de 41.000 gazatíes según el Ministerio de Sanidad del territorio.
Israel anunció una “nueva fase” en la guerra de Gaza y desplegó recursos en el Líbano
La explosión a distancia de aparatos de comunicación y ataques a la infraestructura de Hezbolá por parte de Israel han vuelto a disparar el temor al estallido de una guerra abierta en el Líbano. Desde el gobierno del primer ministro Netanyahu insistieron en la necesidad de acabar con la presencia de Hezbolá en la frontera para que los más de 60.000 evacuados puedan regresar a sus casas.
“Ya he dicho que devolveremos a los residentes del norte (de Israel) a salvo a sus hogares, y eso es exactamente lo que haremos”, reiteró Netanyahu ayer en un breve mensaje de vídeo. Poco antes de que la oficina de Netanyahu publicase el breve vídeo, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, ya había advertido en una visita a las tropas de la fuerza aérea que el país se dirige a una “nueva fase” de la guerra en Gaza, a medida que despliega más fuerzas y recursos en la frontera con Líbano.
Con información de EFE.