Un fotógrafo premiado a nivel internacional consiguió retratar a una especie de ave amenazada en la zona de Guaraní y San Pedro, al norte de la provincia.
El fotógrafo holandés Martjan Lammertink, que reside en Argentina desde el año 2011, logró fotografiar una especie de ave en riesgo. Llamó la atención que la captura realizada por el investigador del CONICET, tuvo lugar en la zona ubicada entre las localidades de Guaraní y San Pedro, en la zona norte de nuestra provincia.
A raíz de este gran hallazgo, Lammertink recibió el reconocimiento de la Asociación Argentina de Fotógrafos de Naturaleza (AFONA). El ave en cuestión, es un ejemplar del Carpintero Cara Canela (Celeus galeatus). Las mismas surgen en el marco de una investigación del biólogo oriundo de Países Bajos.
La premiación se realizó el sábado 31 de agosto durante el Encuentro Regional AFONA en Buenos Aires, donde se entregaron distinciones para 6 categorías. El concurso que la asociación realiza cada año tiene el objetivo de “contar con imágenes historias que ponen en relevancia temas ambientales preocupantes”. En particular, dicen: “donde la fotografía tenga un papel fundamental para ilustrar e inspirar un cambio positivo”.
Carpintero Cara Canela, un ave en riesgo que encuentra refugio en Misiones
A través del estudio de esta especie, se identifican áreas prioritarias de conservación del Bosque Atlántico en Argentina. Las imágenes pertenecen a un trabajo de campo que realizó el experto con radio-telemetría entre los años 2013 y 2019. Se realizaron en los departamentos de San Pedro y Guaraní, como parte de un estudio sobre los requisitos ecológicos de esta especie.
Después de una breve captura mediante redes de neblina de altura, los carpinteros fueron liberados con un radiotransmisor atado a una pluma de la cola. Esto permitió a los investigadores seguir a los carpinteros durante varios meses y estudiar sus hábitos.
El estudio resaltó que esta especie de ave amenazada utiliza grandes territorios y que dobla su necesidad de superficie de selva con explotación selectiva de madera nativa. Las conclusiones del estudio indican que el futuro de la especie depende de mantener la selva en áreas protegidas y en áreas de uso múltiple, en conjunto con comunidades locales, incluyendo a pueblos indígenas como los Mbya Guaraní.