La industria nacional de defensa en Argentina es un sector clave en la seguridad pública y la protección ciudadana. El impulso de proyectos industriales en este ámbito fortalece el desarrollo tecnológico local y la modernización de las instituciones encargadas de salvaguardar el orden público.
En un contexto global donde la seguridad se enfrenta a desafíos cada vez más complejos, figura el papel de empresas como Bersa en la fabricación de armamento portátil. Estos fabricantes proporcionan equipo y permiten que el país alcance un alto grado de independencia tecnológica y reduzca su dependencia de importaciones a otros países como Estados Unidos, con lo cual puede atender mejor las necesidades operativas de las fuerzas nacionales.

Las Fuerzas Armadas al frente de las situaciones de alto riesgo
Durante el Encuentro de Defensa y Seguridad, celebrado en el polígono de tiro del Ejército Argentino en Campo de Mayo, la importancia de estos desarrollos quedó de manifiesto en exhibiciones tácticas y demostraciones de armas y equipamiento por parte de la Policía Federal Argentina, la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, la Policía de Córdoba y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).

Cada una de estas fuerzas mostró su capacidad de respuesta en situaciones de alto riesgo y evidenció su preparación para enfrentar amenazas en entornos críticos. La Policía de Córdoba, por ejemplo, presentó un innovador ejercicio con lanzadoras no letales Byrna, que destacó cómo las opciones de armamento no letal pueden ser efectivas en la protección sin comprometer la vida humana.
Villaruel destacó el impacto de los proyectos industriales en defensa
Victoria Villarruel, vicepresidente de la Nación, asistió al evento y resaltó la importancia del apoyo estatal a estos proyectos industriales en defensa. Por lo que afirmó que “Bersa ejemplifica la competitividad y excelencia en el uso de recursos humanos nacionales”. La funcionaria indicó que el respaldo a estas iniciativas de manufactura local permite dotar a las fuerzas de seguridad de herramientas adecuadas para responder a la realidad del país y, al mismo tiempo, contribuye a la generación de empleos y al fortalecimiento económico de sectores estratégicos.

El encuentro también fue una oportunidad para exhibir equipos y maniobras, además de servir para reflexionar sobre el papel de los veteranos de la Guerra de Malvinas en la seguridad nacional. La presencia de estos excombatientes conectó las experiencias pasadas con los desafíos actuales y futuros, en recuerdo del sacrificio y el valor que caracterizan a quienes protegen al país.
La industria nacional de defensa trabaja de la mano con las fuerzas de seguridad para optimizar las capacidades de protección y respuesta ante emergencias, desde la fabricación de armas y chalecos antibalas hasta vehículos blindados y dispositivos de seguridad. La inversión en tecnología nacional permite que las fuerzas del país puedan actualizar su equipamiento y mantenerse al nivel de los estándares internacionales en operativos de seguridad.