El productor Gabriel Jasiuk remarcó que con la aplicación del fertilizante orgánico se logró que las plantas de la fruta del dragón “tengan más rigurosidad, están mejores”.
Misiones es testigo de un incipiente incremento en el volumen de cosecha de la pitaya, también conocida como fruta del dragón. En los campos que utilizan el fertilizante orgánica, la próxima cosecha anticipa rindes que duplican a la anterior.
En diálogo con Canal 12, Gabriel Jasiuk, productor de Dos de Mayo, destacó que “la estimación de volumen (del rendimiento) para este año ronda entre los 4 mil y 5 mil kilos. Vemos que las plantas están sanas y fuertes. Y el tiempo corrió bien, con muy buenas lluvias”.
Sobre la distribución del producto, señaló que “por el momento está yendo todo a Buenos Aires. Nosotros trabajamos con la firma de Don Tomás”.
Además, contó: “Estamos evaluando con la gente del Senasa para introducir variedades de otros países, conjuntamente con el INTA. Vamos a modificar el sistema de plantación, para trabajar con el sistema de espalderas para poder sacar más volumen ya que tenemos mucha demanda de la fruta“.
El rol de los bioinsumos en la fruta del dragón
En la misma línea, Jasiuk contó que “hace tres años venimos aplicando los bioinsumos de Agrosustentable. Lo que vimos este año es que las plantas tienen más rigurosidad, están mejores, y el daño ocasionado por las heladas se cicatrizó muy bien en las plantas”.

Cabe recordar que, desde que Misiones asumió el compromiso de eliminar el glifosato mediante la Ley de Bioinsumos, más productores comenzaron a incorporar estas herramientas biotecnológicas en sus chacras. La búsqueda de valor agregado a través de la producción agroecológica consolidó a los bioinsumos como un pilar fundamental en los sistemas productivos locales.
Así, el modelo agrícola de Misiones se distingue de los latifundios y monocultivos predominantes en otras regiones del país. Los productores de la provincia residen en sus chacras y generan alimentos tanto para su sustento como para el mercado.