La Policía de la Ciudad de Buenos Aires detuvo esta mañana al cuarto de los 17 prófugos que se escaparon de la comisaría de Liniers haciendo un boquete en la pared.
Se trata de Matías Petrarca, señalado como el más peligroso de los 14 evadidos. Estaba detenido por homicidio agravado en grado de tentativa.
Según confirmaron fuentes policiales a Clarín, Petrarca se había tomado un taxi en las cercanías del club Vélez Sarsfield después del escape y había ido a la casa de su novia.
En las horas que estuvo libre, Petrarca fue cambiando de domicilios en el partido de San Martín. Incluso tuvo tiempo de ir a bailar a un boliche para Navidad.
Este jueves lo detuvieron en Güemes al 800, en Villa Lynch.
Fuente: Clarín
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