La Organización de Estados Americanos (OEA) calificó este viernes como un “crimen de lesa humanidad” la detención de Nahuel Gallo, gendarme argentino arrestado en Venezuela. En un comunicado oficial, el organismo también la consideró “una clara violación de normas internacionales”.
La preocupación de la OEA por Nahuel Gallo
La OEA condenó la detención “arbitraria” y exigió la liberación inmediata de Gallo. Además, solicitó al régimen venezolano que “cumpla con los tratados y acuerdos internacionales sobre derechos humanos y relaciones internacionales”.
En relación con las condiciones de detención, la OEA denunció que “la incomunicación y la negación de asistencia consular y legal representan una clara violación directa de la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares”.
Por su parte, el régimen de Nicolás Maduro acusó a Nahuel Gallo de formar parte de un grupo vinculado “a la derecha internacional” y afirmó que intentó ingresar al país de manera irregular. Las autoridades venezolanas procesaron al gendarme por intentos de actos de terrorismo. Tarek William Saab, fiscal encargado del caso, justificó las acusaciones al declarar: “las declaraciones y acciones realizadas por el gobierno argentino dejan clara la complicidad de las autoridades de esa Nación en planes subversivos”.
La CIDH intervino con medidas cautelares
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) otorgó medidas cautelares para proteger los derechos de Nahuel Gallo. En su documento oficial, el organismo afirmó que “no se han tomado acciones para garantizar una comunicación entre Nahuel Gallo y el país del que es nacional”. Además, la CIDH destacó que no existen en Venezuela recursos internos efectivos para solicitar protección en favor del gendarme.
El comunicado de la CIDH exigió al régimen de Nicolás Maduro las siguientes acciones:
- Proteger los derechos a la vida e integridad personal del gendarme.
- Informar si Gallo se encuentra bajo custodia estatal y detallar las circunstancias de su detención.
- Especificar si el gendarme fue presentado ante un tribunal competente o las razones por las que continúa privado de su libertad.
- Permitir la comunicación del gendarme con su familia y representantes legales, además de otorgar acceso a su expediente penal, de existir.
- Garantizar que Gallo pueda comunicarse con las autoridades de su país de origen.
- Informar sobre las medidas tomadas para investigar los hechos que originaron la medida cautelar y evitar su repetición.
El caso de Nahuel Gallo generó repercusión internacional y presión sobre el régimen de Nicolás Maduro para que respete los derechos humanos y los acuerdos internacionales en el marco de este incidente.