El Índice de Precios Internos al por Mayor (IPIM), es decir, la inflación mayorista, escaló al 1,5% en enero, según informó el INDEC este miércoles. El alza estuvo impulsada por subas en hidrocarburos y productos químicos. Se trató del mayor incremento en cuatro meses, aunque la variación se mantuvo por debajo del “crawling peg” del dólar oficial.
En diciembre, el IPIM había registrado una suba de solo 0,8%. En enero, los productos nacionales impulsaron el índice con un aumento del 1,6%, mientras que los importados crecieron solo 0,5%. La eliminación del Impuesto PAIS, vigente desde el 23 de diciembre, influyó en la menor variación de los bienes importados.
Qué productos alteraron la inflación mayorista de enero
Entre los productos nacionales, los primarios subieron 2,1%, traccionados principalmente por un alza del 4,1% en petróleo y gas. Las manufacturas crecieron 1,4%, con una fuerte presión de las sustancias y productos químicos, que aumentaron 3,1%.
El director de la consultora Analytica, Claudio Caprarulo, analizó el dato y señaló que la aceleración no genera preocupación inmediata. Sin embargo, advirtió que el resultado “muestra que el desafío de profundizar el proceso de desinflación no es menor”. También destacó que “los productos primarios donde los precios se determinan en gran medida en el exterior marcaron fuertes subas”. En ese sentido, consideró clave el seguimiento de los precios en febrero para determinar si el aumento de enero fue un caso puntual o una nueva tendencia.
En comparación con enero de 2024, los precios mayoristas aumentaron un 43,8% interanual. Los productos nacionales crecieron 49%, mientras que los importados registraron una deflación del 2,1%.
A diferencia de la inflación mayorista, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) subió 2,2% en enero, por debajo del 2,7% registrado en diciembre. En términos interanuales, la inflación minorista se ubicó en el 84,5%.
El mes pasado, la indumentaria registró una caída en sus precios, en gran parte debido al cambio de estación. También influyeron la mayor apertura de importaciones y la baja en el consumo.

Expectativas para febrero
La desaceleración inflacionaria también estuvo relacionada con menores aumentos en los servicios públicos, especialmente en vivienda y transporte. El agua lideró la baja en los costos de vivienda, mientras que el transporte mostró ajustes moderados.
Para febrero, los economistas advierten que el precio de los alimentos, especialmente la carne, podría aumentar con más fuerza. Esto genera dudas sobre la posibilidad de sostener el sendero de desinflación.
El IPC y el IPIM miden canastas diferentes. Mientras el IPC incluye más productos no transables con el exterior, el IPIM se enfoca en bienes que sí se intercambian con otros países.