Según el comunicado oficial de la Oficina del Presidente, la medida busca garantizar que el tribunal pueda cumplir con su rol hasta la finalización del próximo período legislativo. Durante ese tiempo, el Gobierno comenzará con el trámite legislativo para que el Senado preste su acuerdo a los pliegos de ambos candidatos. “El Gobierno Nacional no tolerará ni tolerará que los intereses de la política se impongan por sobre los del pueblo argentino, bajo ninguna circunstancia”, concluye el comunicado.
La firma del decreto, que se esperaba tras el regreso de Milei de su visita a Estados Unidos, tiene como último plazo el viernes 28 de febrero, ya que al día siguiente el presidente inaugurará las sesiones ordinarias del Congreso. El artículo 99 inciso 19 de la Constitución Nacional otorga al Ejecutivo la atribución de llenar vacantes en empleos que requieran acuerdo del Senado durante el receso legislativo, mediante nombramientos en comisión, los cuales expiran al finalizar la próxima Legislatura.
De concretarse la firma, Lijo y García-Mansilla ocuparían sus puestos junto a Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti, actuales integrantes de la Corte Suprema. Estas designaciones completan buscan las vacantes dejadas por las salidas de Elena Highton de Nolasco en 2021 y Juan Carlos Maqueda a fines del año pasado.
El trámite de la candidatura de Lijo en el Senado iba a discutirse el pasado viernes, pero el Gobierno se vio obligado a suspender la sesión tras no contar con los números suficientes para aprobar su pliego. A pesar de esta situación, la designación por decreto se extenderá por nueve meses, hasta el fin del año parlamentario. En el caso de Lijo, el actual juez federal deberá renunciar a su cargo antes de asumir en la Corte Suprema.