La muerte de una mujer de 39 años en Bariloche, Río Negro, a causa de hantavirus reactivó la preocupación sobre la zoonosis emergente. Se trata de una enfermedad que puede ser transmitida de los animales al ser humano. Con 24 personas en aislamiento, incluidas sus dos hijos menores de edad, las autoridades sanitarias refuerzan el llamado a la prevención.
En diálogo con Canal 12, la bioquímica posadeña Marina Novosak brindó información sobre la enfermedad y cómo prevenirla. “El hantavirus es una infección viral, aguda y grave transmitida por solo algunos roedores, en especial el ratón colilargo. En Argentina se reportó por primera vez en 1995 y desde entonces es una enfermedad endémica en algunas regiones del país”, explicó.
Síntomas y evolución de la enfermedad
El período de incubación del virus varía entre 1 y 7 semanas. “Al principio, los síntomas pueden confundirse con una gripe: fiebre alta, dolores musculares y articulares, e incluso molestias gastrointestinales. Sin embargo, en casos graves, puede evolucionar a un compromiso cardiovascular severo, que pone en riesgo la vida del paciente”, advirtió Novosak.


Actualmente no existe un tratamiento específico ni una vacuna contra el hantavirus. “El abordaje médico se enfoca en aliviar los síntomas y brindar soporte al paciente. Por eso, es fundamental detectar la enfermedad a tiempo para evitar complicaciones”, agregó.
¿Cómo prevenir el hantavirus?
La prevención es clave para reducir el riesgo de contagio. “El virus se transmite a través de la saliva, orina y materia fecal de ciertos roedores, tales como el ratón colilargo. Este roedor, pequeño pero con una cola larga que duplica el tamaño de su cuerpo, suele habitar en áreas rurales y boscosas”, detalló la bioquímica.
Para minimizar la exposición, Novosak recomendó:
- Mantener los espacios limpios y libres de basura.
- Sellar rendijas y aberturas en viviendas y galpones.
- Ventilar antes de ingresar a lugares cerrados por mucho tiempo.
- Evitar el contacto con roedores y desinfectar superficies con agua y lavandina.
“El hantavirus es una enfermedad grave, pero prevenible. La clave está en conocer los riesgos y tomar las medidas necesarias para evitar la exposición al virus”, concluyó Novosak.