La biotecnología se pone al servicio de la agricultura sostenible. Con el cultivo de plantines de mandioca regenerados en laboratorio se busca fortalecer la producción misionera. Este avance innovador abre nuevas oportunidades de aprendizaje para estudiantes de la región.
En un esfuerzo por transformar la agricultura misionera, el área de I+D de Biofábrica lleva a cabo un proyecto pionero en colaboración con la universidasd pública. Plantines de mandioca regenerados mediante embriogénesis somática fueron transferidos al campo, dando un paso significativo en la innovación y sostenibilidad agrícola.

Biotecnología al servicio del campo
El proceso comenzó en el laboratorio de Biofábrica. A través de la embriogénesis somática se desarrollaron plantines de mandioca sanos y con alto potencial de crecimiento. Estos plantines fueron trasladados a viveros en bandejas y, recientemente, llegaron a la tierra fértil del campus de la UNAU en San Vicente. Esta técnica asegura plantas libres de enfermedades y con un rendimiento optimizado, características claves para fortalecer la producción agrícola de Misiones.
La incorporación de estos plantines en el campo permite a la UNAU evaluar su rendimiento y capacidad de brotación en condiciones reales. Significa un paso esencial para validar su uso en producciones locales. Esta iniciativa subraya la importancia de la biotecnología como herramienta para mejorar la seguridad alimentaria y promover cultivos más eficientes. Sobre todo en regiones como Misiones, donde la mandioca tiene un valor cultural y económico significativo.
Vinculación académica y agrícola
El proyecto no solo marca un avance en biotecnología, sino que también establece un vínculo clave entre la academia y el desarrollo agrícola regional. Los estudiantes de la UNAU participan activamente en los ensayos de campo. De esta forma aplican sus conocimientos en un entorno real, integrando la teoría y la práctica en un aprendizaje transformador. Este enfoque fortalece la formación de profesionales comprometidos con el futuro de la agricultura local.

Cada etapa, desde el laboratorio hasta el campo, es resultado de un esfuerzo de investigación y colaboración que refuerza la innovación en la agricultura misionera. La sinergia entre Biofábrica y la UNAU simboliza el poder de la biotecnología y su impacto positivo en la agricultura sostenible. Esta vinculación además abre el camino hacia un modelo agrícola más eficiente y adaptado a las necesidades del presente y futuro.