Con el inicio de la Fiesta Nacional del Inmigrante comenzó el mayor Festival Gastronómico del Nordeste y del país. En este multiverso de sabores se puede acceder a la cocina étnica de fusión migrante residente.
Con el inicio de la 44° Fiesta Nacional del Inmigrante comenzó el mayor festival gastronómico del Nordeste y del país. En este festival gastronómico que se lleva a cabo en el Parque de las Naciones se desarrolla una variedad de menús difícil de igualar a nivel internacional.

Básicamente se trata de los platos típicos de 15 colectividades que realizan sus actividades en la ciudad de Oberá. En los menús de cada colectividad encontramos la cocina fusión de preparaciones traídas a nuestro país por las distintas oleadas migratorias que hubo. Por un lado, cada familia que se afincó en la zona trajo consigo las recetas de las comidas preparadas en su lugar de origen. Por otro lado, cada colectividad realizó una tarea de investigación antropológica de cada plato.

Muchos de los platos típicos de la Fiesta Nacional del Inmigrante son una recreación de esos platos originales en un multiverso de sabores. Si vamos al país de origen para consumir alguna de estas preparaciones, lo más probable es que nos encontremos con sabores y texturas diferentes. Esto es porque los primeros colonos tuvieron que adaptar sus preparaciones a los ingredientes disponibles, las condiciones meteorológicas o los utensilios a mano.
Uno de los ejemplos más ilustrativos tiene que ver con los chacinados. Las condiciones de humedad y temperatura de regiones de Europa son muy diferentes a las de la Selva Paranaense. Para preparar el reconocido salame se necesitan condiciones de baja humedad y bajas temperaturas. Otro ejemplo es el vino. Las cepas con las que se elaboran los vinos franceses, por ejemplo, requieren condiciones especiales de suelo y una cantidad mínima de días fríos anuales. Es por ello que los vinos coloniales tienen un sabor diferente a los vinos provenientes de la región cuyana o del norte argentino.
Sin embargo, a falta de algunos ingredientes, nuestra tierra provee de otros elementos. Es el caso de la incorporación de la mandioca o del maíz. En el caso de las frutas tenemos el maracuyá (maracuja para los portuófilos), la pitanga o el guapurú o jaboticaba y muchos otros elementos para configurar todo un multiverso de sabores.
De esta manera, el visitante de la Fiesta Nacional del Inmigrante podrá disfrutar de un mundo diferente en cada casa típica. Si nunca estuvo en contacto con otras nacionalidades, el comensal podrá disfrutar de un nuevo universo de sabores. En cambio, si el participante proviene de una familia de inmigrantes, esa persona tendrá la oportunidad de evocar sabores, olores y tradiciones de la infancia.

Algunos ejemplos de este multiverso de sabores
En cada colectividad hay un sabor esperando al visitante para determinar su preferencia y construir un recuerdo. La Casa Alemana tiene como novedad el Schweinshaxe, que es un Codillo de cerdo con chucrut y/o ensalada de papa.
Colectividad Árabe: Shish Kebab, que son brochetas de kafta, carne picada dos veces, macerada en condimentos árabes. Colectividad Brasileña: Feijoada, que es una porción de poroto con arroz y pan. Colectividad Checa: Bramboráky, que es una tortilla de papa con cebolla y panceta. Colectividad Española: Pollo al ajillo, es un pollo troceado con salsa de ajo, pimientos y perejil acompañado de papas.

Para los cultores de la comida exótica, la Colectividad Francesa propone Rana a la Provenzal ó Rana Marinada con ensalada y papas noisette. Si en la casa francesa hay sabores exóticos en la Colectividad Italiana prácticamente todos sus platos son conocidos. Aun así podemos encontrar en esta colectividad el Tortelloni, que es una pasta rellena de calabaza con salsa a elección.
Por su parte, la Colectividad Japonesa también propone su Tonkatsu, que es un carré de cerdo rebozado y acompañado de ensalada. Seguimos con la Colectividad Nórdica y su Stegt Fisk Ledsaget Af Blæksprutte Tentakler, que es un Pescado frito con papas y tentáculos de calamar fríos.

En el caso de la Colectividad Paraguaya, muchos misioneros estarán en contacto con sus comidas, pero para los turistas su Kure tatakua, cerdo al horno con mandioca es muy probable que les sorprenda.
En la Colectividad Polaca a su vez tenemos el Kurczak w sosie polskim z sałatka i piklami o pollo a la polonesa. En la Colectividad Portuguesa se puede degustar la Sopa de Legume, que es una sopa de legumbres.
En la Colectividad Rusa se puede degustar del Lomo Strogonoff Con Puré De Papas. A su vez en la Colectividad Ucraniana podrá disfrutar del Pollo Kiev más alguna de las guarniciones disponibles. Por último, en el Pabellón Argentino, también se pueden disfrutar de las comidas típicas de nuestro país amenizadas con folclore nacional.

Inclusive, entre algunas colectividades hay algunas coincidencias en platos similares. Es el caso de las colectividades eslavas. En estas casas se puede degustar unas pastas rellenas que en la polaca se llama pierogi, en la ucraniana, varenike y en la rusa varenikis con “i”. Sin embargo si viaja a Ucrania deberá pedir pielminis. Usted lector, se preguntará: ¿Y el sabor es el mismo en las tres?. Eso mi querido amigo tendrá que descubrirlo usted.
Por último, si usted comenta este artículo con alguien de Oberá o de algún asiduo visitante a la Fiesta Nacional del Inmigrante, este podrá discutir las propuestas aquí vertidas. ¿Sabe qué? Creale mi amigo, porque no hay artículo que pueda reflejar todo lo que se vive yendo al Parque de las Naciones durante estos días. Hay un multiverso de sabores en este mundo y se llama Fiesta Nacional del Inmigrante.