“Ando medio kaigue”. En Paraguay, esta frase se entiende sin dificultad. Kaigue es una palabra en guaraní que describe el cansancio. En el país existen dos lenguas oficiales: el guaraní y el español. Pero además está el jopará, una fusión que se escucha a diario. “El jopará nace de la mezcla de estas dos lenguas hace más de 200 años”, explica a BBC Mundo el doctor en Lengua Guaraní David Galeano Olivera, profesor en la Universidad Nacional de Asunción y presidente del Ateneo de Lengua y Cultura Guaraní de Paraguay.
Justamente, la palabra jopará significa “mezcla” en guaraní. Según el doctor en Filología Guido Kallfell, autor del libro ¿Cómo hablan los paraguayos con dos lenguas?, esta forma de hablar no es un idioma propio, sino un cambio de código que permite alternar entre español y guaraní en un mismo enunciado. “A escribí ndéve una carta ha nde ne re contestá”, dice una canción popular, que significa: “te escribí una carta y no me contestaste”. También se agregan sufijos guaraníes a palabras en español, como en “¿Por qué piko me decís eso?”, donde piko enfatiza sorpresa.
Las raíces del guaraní en Paraguay
En Paraguay, el guaraní se expandió más allá de las comunidades nativas. Naciones Unidas señala que fue una lengua discriminada durante siglos. Sin embargo, tras la Guerra de la Triple Alianza y la Guerra del Chaco, se consolidó como un símbolo de identidad. “Cuando terminó la Guerra de la Triple Alianza, Paraguay quedó devastado. Fueron las mujeres quienes educaron a sus hijos en guaraní pese a existir una orden de prohibición“, explicó Galeano Olivera.

Igualmente, el guaraní enfrentó resistencias en la educación. En el siglo XX, su uso en las escuelas podía significar castigos. Galeano Olivera señaló que “existieron sanciones como arrodillarse, recibir golpes en la boca o perder puntos en las calificaciones por hablar en guaraní”. En 1967, la Constitución lo declaró lengua nacional, y en 1992, lengua oficial junto con el español. Sin embargo, la enseñanza sigue siendo un reto. “Muchos niños que hablan guaraní en casa nunca fueron alfabetizados en su idioma, lo que ha provocado deserción escolar“, agregó el lingüista.
El jopará es un idioma de la calle

No obstante, el jopará domina el habla cotidiana en Paraguay. Hoy, el guaraní hablado en el país es mayormente jopará, una mezcla similar al spanglish en Estados Unidos. Este fenómeno ha dado lugar a lo que algunos llaman “español paraguayo” o “guaraní paraguayo”, un híbrido entre ambas lenguas que se ha convertido en parte de la identidad lingüística del país.
El uso extendido del guaraní y su mezcla con el español en gran parte de la población paraguaya, incluso en aquella que no tiene raíces nativas, convierte a Paraguay en una rareza lingüística en todo el continente.