Habían sido rescatados en distintas situaciones. Ingresaron al Parque Ecológico El Puma para un minucioso proceso de rehabilitación a cargo del personal especializado.
El Valle del Cuñá Pirú recibió a quince coatíes y cuatro tucanes. Estos animales, hace varios meses, habían ingresado al Parque Ecológico El Puma para transitar por un proceso de rehabilitación a cargo de personal especializado. Tras su recuperación, esta semana volvieron a su hábitat.
Los responsables de cuidar a los animales silvestres fueron varios guardaparques del Ministerio de Ecología, técnicos del Parque Ecológico El Puma y el subsecretario de Ecología, Alan Benítez Vortisch. El equipo a cargo expresó que fue un momento muy especial, porque detrás de cada ejemplar hay una historia de tristezas, alegrías y, sobre todo, superación.
Los cuatro tucanes eran crías que habían quedado fuera del nido, por lo que tenían pocas probabilidades de sobrevivir. Estuvieron más de tres meses en el centro de rehabilitación, antes de retornar a la selva. En el proceso, los guardaparques los asistieron para que aprendan a volar, a alimentarse y a enfrentar a los depredadores. En el predio, los pichones compartieron su estadía con un tucán adulto que sirvió como recurso para transmitir sus costumbres.
Cría en manada
Los quince coatíes, en tanto, estuvieron un año en el parque El Puma. Algunos habían llegado después de ser sometidos al mascotismo (retención de animales). Estas crías se quedaron sin madre, que murió en un accidente de tránsito. En este caso, hubo que acoplarlas a una hembra para que se hiciera cargo de la crianza. También a una manada conformada por cuatro machos, cuatro hembras y siete ejemplares más jóvenes. Esta medida se implementó porque la especie se mueve en grupo.
Los coatíes fueron entrenados para la vida silvestre y antes de liberarlos se les hizo un chequeo clínico y parasitológico, para determinar si estaban en buen estado. El resultado fue un nivel sanitario óptimo.
Cada animal que regresa a su hábitat, su lugar, significa una victoria para el modelo de conservación que lleva adelante la provincia. Ahora viven libres en el Parque Provincial Salto Encantado.
