Misiones se encuentra bajo la influencia de una densa capa de humo, resultado de los incendios de Bolivia y la Amazonía. Desde la Fundación Vida Silvestre, subrayan la urgencia de adoptar métodos agrícolas más sostenibles para evitar la quema indiscriminada. Se espera que a partir del jueves 26 de septiembre, la llegada de un frente frío y la consiguiente lluvia dispersen el humo.
Los incendios forestales en Bolivia y la Amazonía representan una amenaza significativa para la salud ambiental y la población de toda la región, lo que incluye al territorio misionero. A lo largo de este año, más de 4 millones de hectáreas fueron devastadas en el país andino, con un 40% de estas áreas afectadas en bosques nativos.

Desde los últimos días, Misiones se encuentra bajo la influencia de una densa capa de humo, resultado de los incendios en esas áreas. Sin embargo, el pronóstico meteorológico ofrece un rayo de esperanza: se espera que a partir del jueves 26 de septiembre, la llegada de un frente frío y la consiguiente lluvia dispersarán este humo, lo que mejoraría la calidad del aire en toda la provincia.
Desde la Fundación Vida Silvestre subrayan la urgencia de adoptar métodos agrícolas más sostenibles para evitar la quema indiscriminada. En declaraciones con Canal 12, el especialista en Bosques de la fundación, Ariel Medina, en diálogo con Canal 12, advierte sobre la necesidad de repensar el uso del suelo en estas regiones. “Es importante pensar bajo qué régimen de uso de suelo se van a crear en estos ambientes para poder recuperarlos”, asegura.
Además, propone alternativas viables como la siembra directa y la ganadería regenerativa, que “buscan el cuidado del suelo, utilizar especies adaptadas localmente y la protección del agua en tanto se recupera la biodiversidad”.
La situación actual en la región debe servir como un llamado urgente para reconsiderar las prácticas agrícolas y de manejo del territorio. Medina destaca que “la agricultura debe incorporar mayores nociones de cuidado del suelo y recuperación ambiental” mediante técnicas tradicionales como el barbecho y la rotación de cultivos.
La situación de estos incendios forestales alertan sobre la necesidad de un sistema de alerta temprana eficaz, como el que consolida Misiones. Javier Peralta Ramos, guardafauna de Córdoba, lamentó la eliminación de un sistema que había sido crucial para prevenir incendios: “Antes del año 2000, logramos implementar un sistema de alerta temprana que evitó incendios durante 15 años. Sin embargo, al eliminar este sistema, estamos viviendo una calamidad nunca antes vista”.

De acuerdo a información proporcionada por el Ministerio de Ecología, Misiones, hogar del 52% de la biodiversidad de Argentina, enfrenta un desafío en la prevención y logra resultados óptimos de manejo mediante herramientas legislativas que dan marco a diversos operativos. El hecho de contar con más de 1,6 millones de hectáreas de bosques nativos y 350 mil hectáreas de bosques implantados, lleva al Gobierno provincial a fortalecer el Plan Provincial del Manejo del Fuego.
Dicho plan se desarrolla bajo la Dirección General de Alerta Temprana, creada en 2006, cuya principal tarea es recopilar y evaluar información sobre amenazas naturales y vulnerabilidades del territorio, así como establecer estrategias de detección temprana.
Un aspecto clave de este plan es la Base Apóstoles, que desde hace más de 10 años juega un papel central en la implementación de estrategias contra incendios. En 2023, se fortaleció con la instalación de la Base Regional NEA del Servicio Nacional de Manejo del Fuego. Esta nueva incorporación permite la colaboración conjunta entre brigadistas provinciales y nacionales, así como el uso compartido de medios aéreos y terrestres.