El gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, reiteró su intención de avanzar con la renovación de los jueces de la Corte Suprema provincial. La llegada de dos nuevos ministros este lunes no lo dejó conforme. Insiste en la salida de los tres jueces que superaron los 75 años. Aseguró que buscará un acuerdo, pero advirtió que no dudará en recurrir al decreto si es necesario.
“Tenemos el derecho constitucional de hacerlo”, afirmó en declaraciones radiales. Destacó que la transformación del máximo tribunal es una de sus prioridades desde que era candidato. Aseguró que la Justicia debe brindar respuestas más ágiles y eficientes. “La Justicia tiene que dar hoy una respuesta que no dio en los últimos veinte años”, subrayó.
Los jueces en la mira
Pullaro apuntó a los magistrados Rafael Gutiérrez, Eduardo Spuler y Roberto Falistocco, quienes superaron la edad límite establecida por la nueva normativa. “Son tres personas con las que tengo mis diferencias desde hace mucho tiempo”, expresó. Recordó que, cuando fue ministro de Seguridad, los jueces minimizaron el vínculo entre la seguridad y la Justicia y hasta pidieron su renuncia. Sin embargo, reconoció que “son personas que le han dejado mucho a la provincia” y que “no hemos tenido escándalos ni problemas”.
A pesar de ese reconocimiento, el gobernador insistió en la necesidad de un cambio generacional. “Cumplieron un ciclo importante, pero claramente tiene que venir una renovación que nos permita una Justicia más barata, más eficiente y más cercana”, afirmó. Explicó que el paso del tiempo afecta el desempeño en cualquier ámbito. “Imagínenme a mí dentro de treinta años si sigo siendo gobernador. Indudablemente no le voy a dar lo mismo a la provincia”, ejemplificó.
Decreto, la herramienta de Pullaro para avanzar contra los jueces
Pullaro logró que la Legislatura aprobara una ley que amplió la Corte de seis a siete miembros y fijó los 75 años como edad tope. Esa reforma dejó en una posición frágil a los jueces de mayor edad, quienes habían sido designados en su mayoría por gobiernos justicialistas.
A pesar de la presión del Ejecutivo, los tres magistrados no muestran intención de retirarse. La opción del decreto de cese podría derivar en una batalla judicial. Si los jueces presentan un amparo, el conflicto podría prolongarse hasta cuatro años, llegando incluso a la Corte Suprema de la Nación.
El viernes se abrirá el Año Judicial en Rosario y Falistocco, uno de los jueces señalados, será el orador principal. Se espera que en su discurso haga referencia a la postura del Ejecutivo y refuerce la intención del sector de resistir los cambios impulsados por Pullaro.
Una pulseada de largo plazo
El gobierno santafesino dejó en claro que está dispuesto a jugar fuerte en este enfrentamiento. El año pasado, desde la Casa Gris recordaron que estos jueces avalaron la condena al exmagistrado Fraticelli, proceso que evidenció fallas en el sistema judicial. También se opusieron a la implementación del modelo acusatorio. En privado, fuentes del Ejecutivo ironizaron sobre la situación. “Les ponemos una placa, un busto, les decimos que se vayan a disfrutar de las mieles de sus jubilaciones de millonarios”, deslizaron.
Este lunes asumieron como nuevos ministros Jorge Baclini y Margarita Zabalza, mientras que el 30 de abril se sumará Rubén Weder. Con estos ingresos, el oficialismo considera que el tribunal empezó a cambiar su perfil. Sin embargo, Pullaro dejó claro que no se conformará con una reforma parcial y que insistirá en la salida de los jueces mayores de 75 años.
