A seis días del temporal que afectó a Bahía Blanca y sus alrededores, este jueves las autoridades locales confirmaron que las 194 personas que habían sido reportadas como desaparecidas estaban incomunicadas y ya lograron contactar a sus familias. Pero por el momento, la búsqueda de Pilar y Delfina Hecker, de 1 y 5 años, sigue en marcha. Actualmente, son las únicas personas desaparecidas tras la tormenta.
De acuerdo a Ámbito Financiero, desde el inicio de la emergencia, el Centro de Atención Telefónica de Emergencias recibió un total de 192 reportes de personas que no habían podido ser localizadas. Finalmente, todas ellas fueron halladas. Entre esas denuncias, se registraron dos fallecimientos: Rubén Zalazar, chofer de la empresa Andreani, y Ángel Mosman.
Según informaron desde Bahía Blanca, en la mayoría de los casos, la falta de comunicación se debió a la interrupción del suministro eléctrico. También a factores como la caída del servicio de telefonía o la pérdida de dispositivos móviles. Juan Pablo Fernández, fiscal general de la ciudad, señaló en diálogo con La Nación que “siguen entrando algunos llamados, y puede haber gente que no tenga familiares que se preocupen por ellos”.
Continua el operativo para encontrar a las hermanas desaparecidas por el temporal
Las tareas de rastrillaje continúan en la entrada a General Cerri, donde las hermanas Hecker fueron arrastradas por la corriente. En el operativo participan distintas fuerzas de seguridad con ambulancias y gomones. Al respecto, el ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, explicó este martes que “estamos concentrados en la búsqueda de las dos nenas, estamos haciendo un intenso operativo de búsqueda en el agua con medios acuáticos, con bomberos que van en kayak, en botes”.
Marina Haag, madre de las niñas, relató que ambas se refugiaron en una camioneta antes de que la corriente las arrastrara. Según su testimonio, la familia viajaba en su vehículo cuando el agua desplazó la camioneta unos 350 metros y comenzó a inundarla. En un intento por salvarse, madre e hijas, junto con un empleado de Andreani, subieron al techo del vehículo. Sin embargo, la creciente del agua las arrastró en cuestión de segundos.