Ganar la Copa Argentina era, para Boca, la vía de acceso más sencilla a la próxima Copa Libertadores. La agónica y dolorosa eliminación ante Vélez en semifinales le dejó una única forma de clasificar: la tabla anual. Además de ganar su partido restante contra Independiente (ya venció a Newell´s), el Xeneize deberá rezar para que se den algunos resultados a su favor.
Los dirigidos por Fernando Gago podrían sumar los tres puntos que le faltan y aún así quedar afuera del certamen continental. Lo cierto es que de todas las combinaciones posibles entre campeones los dos certámenes que se disputan en la actualidad es que Huracán se consagre campeón de la Liga Profesional y Central Córdoba, corone en la Copa Argentina.
Cualquier otra combinación lo meterá a Boca en la próxima Copa Libertadores. En caso de ser así, existen dos posibilidades: que ingrese desde fase de grupos o tenga que jugar fase repechaje.
Para disputar fase de grupos directamente, Boca Juniors deberá aguardar una sola combinación de resultados: que Talleres de Córdoba salga campeón del torneo local y que Vélez lo haga en Copa Argentina.
Otras combinaciones de resultados (salvo Huracán Campeón Torneo local y Central Córdoba Campeón de la Copa Argentina), lo meterá a Boca pero en fase repechaje.
