Néstor Pitana, quien está a cargo de la Comisión de Árbitros de la Federación Ecuatoriana de Fútbol, cumplirá un rol similar en la CBF. Fue contratado como uno de los consultores externos para mejorar el nivel de los árbitros en el Brasileirao.
El misionero de 49 años, quien dirigió la final del Mundial de Rusia 2018 entre Francia y Croacia, encabezará un nuevo comité asesor compuesto por referentes de talla internacional, como el italiano Nicola Rizzoli (árbitro de la final del Mundial 2014 entre Argentina y Alemania), Sandro Ricci y Rodrigo Martins Cintra.
Actualmente, el oriundo de Corpus, es el presidente de la Comisión Nacional de Árbitros de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF). No obstante, según publicó el ente ecuatoriano en su página oficial, la tarea de Pitana es perfectamente compatible con sus funciones vigentes en la FEF, ya que “su rol dentro del comité en la CBF será exclusivamente para brindar su experiencia en el análisis de jugadas y estos estudios se realizarán de manera telemática”.
“Néstor Pitana, Presidente de la Comisión de Árbitros de la FEF, recibió el llamado de la CBF para integrar su Comité Internacional de Consultoría. Continuará liderando la Comisión de Árbitros de la FEF, aportando su experiencia en este nuevo desafío de manera remota”, completó la federación de Ecuador en sus redes sociales oficiales.
La llegada de Pitana no se dio de casualidad. Brasil, a pesar de su poderío futbolístico y económico, ha visto cómo su arbitraje ha perdido peso en las competiciones internacionales. Las críticas por inconsistencias en el VAR, decisiones polémicas en el Brasileirao y la falta de representantes en las instancias finales de torneos de la FIFA, han puesto en evidencia la necesidad de una renovación urgente.
Siguiendo el ejemplo de otros árbitros argentinos que han contribuido a la formación en el extranjero—como Horacio Elizondo en Paraguay y Costa Rica, Javier Castrilli en Chile y Patricio Loustau en San Pablo—Pitana se suma a la CBF con la misión de modernizar la capacitación arbitral y devolverle a Brasil un nivel acorde con su historia futbolística.
El despido de Seneme, quien ya había ocupado un cargo similar en la Conmebol, refleja el descontento con la gestión actual. Ahora, con la incorporación de Pitana, la CBF busca dar un giro de 180 grados, apostando a la experiencia, la enseñanza y la rigurosidad de un árbitro considerado como modelo a seguir en todo el continente.