La ciencia intenta descubrir los secretos de estos misteriosos organismos para ver si pueden ayudarnos a controlar nuestro propio proceso de envejecimiento
Hay especies que son técnicamente inmortales y pueden ser eternamente jóvenes. Los biólogos la llaman “inmortalidad biológica”, esto quiere decir que estos organismos raramente mueren por ponerse viejos.
Los científicos investigan a estas criaturas que parecen haber descifrado el código para detener el envejecimiento, e incluso revertirlo. Y así develar los misterios del envejecimiento humano.
El puesto uno es para Turritopsis dohrnii, la medusa inmortal, descubierta en la década de 1880 en el mar mediterráneo. Sin embargo ahora se la puede encontrar en otros lugares debido al agua de lastre que vierten los barcos.

Lo sorprendente de este tipo de medusa es que puede reiniciar su ciclo vital, cuando la medusa sufre estrés se transforma en una etapa vital anterior y a este proceso se lo llama transdiferenciación. Sin embargo, eso no es todo porque cuando vuelve a su vida anterior también crían más organismos con el mismo código genético así que básicamente al rejuvenecer, se clona a sí misma.
La hidra, entre los animales inmortales
El puesto dos es de la Hidra, la criatura de aspecto alienígena es un invertebrado de agua dulce con un cuerpo tubular y tentáculos a alrededor de la boca, utiliza esos tentáculos para picar a sus presas que son; gusanos pequeños, crustáceos y otros invertebrados. Las Hidras se hicieron famosas en 2018 cuando investigadores de la universidad de california plantearon la hipótesis de que podrían ser inmortales gracias a su capacidad de controlar algo llamado “genes transposones”, al controlar estos genes controlan su envejecimiento.

Por último, en el puesto tres, pero no menos importante, se lo llevan las Planarias. Es un tipo de gusano que se encuentra en todo el mundo y tiene una capacidad ilimitada de regenerar células madre. Se conocen desde finales del siglo 19 pero se hicieron virales en 2012 cuando la universidad de Nottingham publicó un estudio sobre su potencial inmortalidad.

Además, hay dos tipos de planarias, las que se reproducen sexualmente y otras asexualmente. Y los científicos del Nottingham descubrieron que las asexuales al dividirse en dos son capaces de rejuvenecer su ADN.
N.N