Lucas Vogel es uno de los 50 finalistas del GEMS Education Global Teacher Prize, también considerado como el “Nobel de la Educación”. Es un docente obereño de matemáticas y vincula su vocación con la solidaridad y la empatía. Busca proporcionar una educación inclusiva, adaptativa y de calidad en contextos vulnerables. En declaraciones a LT 17 dio detalles del proceso de selección y cómo vive estos momentos como uno de los mejores educadores del mundo.
“Es algo increíble. No puedo creer que haya pasado esto de ser elegido entre tantos”, mencionó Vogel. Respecto al proceso de selección, comentó que “como docentes tenemos que estar actualizados. Hay una fundación que propone reflejar a profesores innovadores, como alumnos destacados”.

Vogel precisó que todos los años abren la convocatoria e invitan a los docentes a mostrar lo que hacen y cuenten su trabajo. “Se me ocurrió mostrar lo que hago en los espacios donde trabajo. Yo me postulé para mostrar lo que hago y quizás le podía servir a otro. Me gusta compartir lo que hago, entonces así, se me ocurren mejores ideas”, comentó.
Vogel detalló que expuso sus proyectos y trabajos para compartir y “de repente me encontré con llamadas y evaluaciones importantes. Que me llamen y me digan “estás entre los 50, uno de los 11 de Latinoamérica y de los 2 argentinos“.
Vogel, un docente que prioriza la Enseñanza y empatía
“Lo que más me gusta hacer es enseñar o intentar ayudar a las otras personas a que aprendan y el conocimiento sea más fluido y así que todos tengamos la posibilidad de aprender”, comentó el docente.
Respecto a sus trabajos, mencionó que enseña matemáticas en un colegio secundario. “Aparte doy clases en un centro de día para personas con discapacidad. Además en un hogar para niños y adolescentes en situación de vulnerabilidad. Hago un puente en este espacio para su escuela formal”.
Respecto a las primeras reacciones al ser seleccionado entre los mejores 50 docentes del mundo, comentó que ya integra varios grupos de WhatsApp donde interactúa con sus colegas. “Son personas super inteligentes que además le ponen el corazón y las ganas para que el aprendizaje sea efectivo para todos”, dijo en declaraciones a la radio. “Esto ya es un premio. Poder compartir con ellos nuestras ideas para aplicarlas o que te enseñen modelos de enseñanza”, valoró.
En cuanto a cómo continúa el proceso, explicó que a fines de enero de esos 50 quedarán 10. En Dubái, entre el 11 y el 13 de febrero, se nombra al Global Teacher Prize con un millón de dólares.
De conseguir el premio, Vogel contó que “buscará capacitarse y así “hacer que más personas también puedan hacerlo para ser mejores docentes”. En ese sentido, añadió que “solamente sé que voy a seguir poniéndole ganas para que la educación sea un poco mejor y se atienda a los lugares más vulnerables”.
“Estoy muy orgulloso de pertenecer a esta provincia y de decir que desde acá, desde Oberá hacemos este cambio que vemos en el mundo de la educación. Me salta el pecho del orgullo”, agregó el docente.