Los rebeldes hutíes de Yemen reivindicaron dos ataques contra el portaaviones estadounidense USS Harry Truman en el Mar Rojo entre el domingo y el lunes. El lunes, indicaron que un “segundo” ataque fue llevado a cabo con “numerosos misiles balísticos y de crucero, además de drones”. Las acciones fueron en respuesta a los bombardeos estadounidenses del sábado contra sus bastiones, incluida la capital, Saná, que dejaron 53 muertos y 98 heridos, según el Ministerio de Salud de los rebeldes.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump advirtió en su red Truth Social. que “cada disparo realizado por los hutíes será considerado, a partir de este momento, como un disparo realizado desde las armas y el liderazgo de IRÁN, e IRÁN será considerado responsable, y sufrirá las consecuencias, ¡y esas consecuencias serán nefastas!”. En paralelo, Washington intensificó la presión sobre Irán con sanciones y nuevas ofensivas militares en la región.
La ofensiva en Yemen puede extenderse por semanas
Los ataques aéreos estadounidenses incluyeron el bombardeo a una planta de algodón en la región occidental de Hodeida y la cabina del barco “Galaxy Leader”, al norte de Saná, según el canal Al Masirah, controlado por los hutíes. Un funcionario estadounidense citado por Reuters indicó que la ofensiva podría prolongarse durante semanas. El secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, afirmó en el programa “Face The Nation” que “estamos haciendo un favor al mundo entero al deshacernos de estos tipos y de su capacidad para atacar el transporte marítimo global”.
En respuesta a los bombardeos, Abdulmalik al Huthi, líder de los insurgentes, llamó a los yemenitas a movilizarse “por millones” contra Estados Unidos. Miles de personas se manifestaron en Saná y otras ciudades como Saada, Dhamar, Hodeida y Amran, con pancartas y rifles, con coros de “Muerte a Estados Unidos, muerte a Israel”. Los hutíes, que controlan las zonas más pobladas de Yemen pese a una década de bombardeos liderados por Arabia Saudita, han atacado barcos en el Mar Rojo desde noviembre de 2023 en “solidaridad con los palestinos”, según sus declaraciones.
La condena de Irán
El gobierno de Irán condenó los ataques “bárbaros” de EE.UU. y advirtió sobre posibles represalias. “Irán no busca la guerra, pero si alguien la amenaza, dará respuestas apropiadas, resueltas y definitivas“, afirmó el general Husein Salami, jefe de los Guardianes de la Revolución. Hamas y Hezbollah también condenaron los bombardeos contra Yemen. Analistas del Grupo Eurasia señalaron que esta nueva campaña estadounidense marca “una escalada significativa en el conflicto”.
Desde el 19 de enero, los hutíes habían detenido sus ataques tras la entrada en vigor de una tregua en Gaza, pero el 11 de marzo anunciaron su reanudación. Estados Unidos ha insistido en que Irán deje de apoyar a los hutíes, mientras que Rusia, aliado de Teherán, ha instado a evitar “el uso de la fuerza” y apostar por el “diálogo político”. El jefe de la diplomacia de EE.UU., Marco Rubio, advirtió a su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, que “no se tolerarán los continuos ataques hutíes contra embarcaciones militares y comerciales estadounidenses en el mar Rojo”.