El presidente de Ucrania, Volodímir Zelensky, propuso este jueves ante el Consejo Europeo una tregua aérea y marítima como primer paso para un acuerdo negociado con Rusia. “Todos deben garantizar que Rusia, el único motivo de esta guerra, acepta la necesidad de ponerle fin. Esto puede demostrarse con dos formas de silencio: no más ataques a la energía y a otras infraestructuras civiles, una tregua para los misiles, las bombas y los drones de largo alcance, y no más operaciones militares en el mar Negro”, declaró en Bruselas.
El mandatario agregó que esta pausa debe ser “lo próximo” para avanzar hacia las negociaciones y propuso que la liberación de prisioneros de guerra por ambas partes contribuya a generar confianza entre los países. “Los ucranianos, los europeos, los estadounidenses y todo ser humano con corazón en este mundo está en desacuerdo con la guerra, todos tenemos que sentir que los rusos no nos están engañando”, señaló.
La respuesta de Rusia a la tregua
De acuerdo a EFE, la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, rechazó la propuesta al considerarla un intento para dar un “respiro” a las fuerzas ucranianas. Justamente, afirmó que “se necesitan acuerdos firmes para una solución definitiva”. Es más, calificó cualquier pausa breve como “absolutamente inaceptable, ya que conduciría exactamente al resultado contrario”.
Según la portavoz, Ucrania aprovecharía ese periodo para “reforzar sus capacidades militares”. “En este escenario, el conflicto inevitablemente se reanudará con más intensidad”, sostuvo durante una rueda de prensa. De igual manera, Moscú ha rechazado en el pasado treguas similares por temor a que se utilicen para reorganizar las tropas ucranianas.
La propuesta suma apoyo internacional
Además, el presidente francés, Emmanuel Macron, había mencionado días antes la idea de una tregua de un mes en los mismos términos propuestos por Zelensky. Mientras, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, expresó su respaldo a una pausa humanitaria. En tanto, Estados Unidos ha evitado pronunciarse sobre la propuesta.
Por su parte, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, convocará la próxima semana a los portavoces parlamentarios para analizar la situación y las posibilidades de mediación.
