Unos 78 diputados deberán hacerse la prueba en el marco de un nuevo reglamento interno de “transparencia”. La prueba será semestral y se aplicará al menos dos veces a cada parlamentario dentro su gestión.
Un total de 78 diputados del Congreso chileno deberán someterse a una prueba de estupefacientes, en el marco de un nuevo reglamento interno que busca darle “transparencia” a la labor parlamentaria. Cada uno de los legisladores fueron seleccionados a través de un sorteo.
De este modo, buscan evitar cualquier tipo de delitos de narcotráfico y similares en la Cámara. “La normativa busca elevar los estándares de transparencia en la labor parlamentaria, además de evitar delitos relativos al narcotráfico y cualquier relación de este flagelo con la Cámara“, indicó un comunicado de la Cámara de Diputados.
El test será semestral y se aplicará al menos dos veces a cada parlamentario dentro su gestión de cuatro años. A finales de septiembre, deberán aplicarse la prueba los diputados restantes (son 155 en total).
Los resultados, que se tendrán entre 10 a 15 días, serían públicos y en caso de dar positivo, se podría levantar el secreto bancario para evidenciar que no haya movimientos de dinero que no se puedan justificar.
IE
