Con chaleco naranja y amarillo fosforescente, Donald Trump se subió este miércoles a un camión de la basura para sacar partido de un desliz del presidente Joe Biden sobre sus seguidores a seis días de las elecciones presidenciales en Estados Unidos.
“¿Qué les parece mi camión de la basura? Este camión es en honor de Kamala y Joe Biden”, dijo el candidato republicano a la Casa Blanca desde el asiento del pasajero. Para él, su rival demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris, y Biden ofendieron a sus seguidores.

La polémica partió en realidad de los republicanos. Uno de los teloneros de un mitin de Trump en Nueva York, el comediante Tony Hinchcliffe, dijo el fin de semana que Puerto Rico, un Estado libre asociado a Estados Unidos, es una “isla flotante de basura”.
El chiste costó caro a la campaña de Trump. Una ola de repudio de la comunidad boricua, includios varios canantes famosos con Bad Bunny o Ricky Martin, invadió las redes sociales con airados mensajes de rechazo.
La crítica de Biden
Quien se sumó al rechazo fue el presidente Biden. Justo cuando las aguas se calmaron y Kamala Harris buscaba llevar un mensaje de unidad y tranquilidad al electorado de cara a las elecciones del próximo martes.
Biden embarró el mensaje de unidad de su candidata al llamar a todos los simpatizantes de Trump (millones de estadouunideses) “una basura”. “La única basura que veo flotando ahí fuera son sus seguidores”. “Su, su, su demonización de los latinos es inconcebible y es antiestadounidense”, dijo.

En la red social X, el presidente intentó quitar hierro al asunto diciendo que se refería “a la retórica odiosa sobre Puerto Rico lanzada por un partidario de Trump”. De poco sirvió. El comentario se convirtió en un balón de oxígeno para el republicano y una losa para la vicepresidenta. Harris se desmarcó de su jefe diciendo que está “en desacuerdo con cualquier crítica a las personas basada en por quién votan”.
El camión de basura
Trump aprovechó la ocasión. El miércoles en Wisconsin, bajó las escaleras del Boeing 757 que lleva su nombre, caminó sobre una pista empapada de lluvia y, después de errarle dos veces la manija de la puerta, se subió al asiento del pasajero de un camión de basura blanco que también llevaba su nombre.
El expresidente, que alguna vez fue una estrella de reality shows conocido por su talento para el espectáculo, se salió con la suya. “¿Qué les parece mi camión de la basura?”, dijo Trump, vestido con un chaleco de seguridad naranja y amarillo sobre su camisa de vestir blanca y corbata roja. “Esto es en honor a Kamala y Joe Biden”, disparó.
“Joe Biden finalmente dijo lo que él y Kamala realmente piensan de nuestros partidarios. Los llamó basura”, afirmó Trump en un mitin en Carolina del Norte y en otro en Wisconsin.
“Mi respuesta a Joe y Kamala es muy sencilla: no puedes dirigir Estados Unidos si no amas a los estadounidenses”, afirmó el expresidente republicano (2017-2021).
Desde la ventanilla del camión, mantuvo un diálogo con los periodistas, algo similar a lo que hizo a principios de este mes durante una oportunidad para tomar fotografías que organizó en un McDonald’s de Pensilvania.
Con información de Clarín