La tecnología estadounidense ayuda a las tropas ucranianas a defenderse de las armas Kinzhal del Kremlin, consideradas como “ideales” por Vladimi Putin.
Desde la Fuerza Aérea de Ucrania aseguraron este fin de semana que derribaron un misil hipersónico ruso dirigido a Kiev, con la utilización de un sistema de defensa Patriot que le donó Estados Unidos recientemente. Esa fue la primera vez, al menos conocida, que el país logra interceptar uno de los proyectiles más modernos del arsenal de Moscú y que puso en funcionamiento esta tecnología de Washington.
El comandante de la Fuerza Aérea ucraniana, Mykola Oleshchuk, señaló el sábado en un mensaje en Telegram que el misil balístico del tipo Kinzhal había sido interceptado en un ataque nocturno sobre la capital, a principios de semana.
“Sí, hemos derribado el inigualable misil Kinzhal”, escribió Oleshchuk. Detalló: “Ocurrió durante el ataque nocturno del 4 de mayo en los cielos de la región de Kiev”. Según el comandante, el misil Kh-47 fue lanzado por un avión MiG-31K desde territorio ruso y fue derribado con un Patriot. “Felicito al pueblo ucraniano por este acontecimiento histórico”, acotó.
El Kinzhal, el “arma ideal” para Putin
El Kinzhal es una de las armas más modernas y avanzadas de Rusia. El ejército del Kremlin sostiene que el misil balístico aéreo tiene un alcance de hasta 2.000 kilómetros. Vuela a una velocidad diez veces superior a la del sonido, lo que complica derribarlo.
La combinación entre una velocidad hipersónica y una ojiva pesada le permite destruir objetivos fortificados, como búnkeres subterráneos o túneles en las montañas. En el pasado, incluso, desde el Ejército ucraniano habían admitido que no tenían medios para detenerlos. El propio presidente ruso, Vladimir Putin, presentó el Kinzhal en 2018 y lo calificó de “arma ideal” por su dificultad para ser interceptado.
Sistema Patriot
En tanto, Ucrania recibió su primera entrega de Patriot a finales de abril. Desde ese entonces no especificó cuántos de estos sistemas tiene, ni dónde están desplegados, pero se sabe que fueron suministrados por Estados Unidos, Alemania y Holanda.
Berlín y Washington reconocieron haber enviado al menos un sistema cada uno. Mientras, desde Ámsterdam indicaron que mandaron dos, aunque no está claro cuántos se encuentran operativos actualmente. Las tropas ucranianas recibieron la información necesaria para localizar de forma efectiva un objetivo con esa tecnología, fijarlo con el radar y disparar.
Por su parte, el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, dijo que ese sistema fortalecería “de forma significativa” las defensas de su país frente a los ataques rusos.
Por los altos costos de utlización, sin embargo, se cree que Kiev solo lo aplicaría para ir contra aviones o misiles hipersónicos. Es que cada batería requiere hasta 90 personas para su mantenimiento y funcionamiento. Asimismo, demanda aproximadamente cuatro millones de dólares por misil. Cada lanzador cuesta alrededor de 10 millones de dólares, de acuerdo con los analistas.
El ministro ucraniano de Defensa, Oleksii Reznikov, dijo que pidió por primera vez sistemas Patriot cuando visitó Estados Unidos en agosto de 2021, meses antes del inicio de la invasión rusa. Siete años después de que Moscú se anexionó de forma ilegal la península de Crimea. El Patriot fue desplegado por primera vez por Washington en la década de 1980.
Agencias AP y AFP
