Las obras de la construcción de un nuevo puente ubicado en una zona rural a seis km del casco urbano, solucionará problemas de conectividad a los productores que trabajan en la zona. Las tareas están en su etapa final y cuentan con una fuerte inversión del Estado provincial, a través de la Dirección Provincial de Vialidad.
La construcción del puente de Mojón Grande se encuentra en su etapa final y, una vez finalizada, traerá numerosos beneficios a los pobladores. El camino por donde pasa el viaducto conecta las rutas provinciales 215 y 209 y las localidades de Florentino Ameghino, San Javier y Gobernador López.
Mojón Grande se caracteriza por la producción de caña de azúcar. También cuenta con cultivos de yerbas mate y tabaco, como el desarrollo de actividades maderera y ganadera. El puente facilitará a los colonos el transporte y traslado de la producción primaria.
Para el intendente de Mojón Grande, Adrián Solís, esta obra “era muy necesaria para los vecinos, ya que se encuentra en una zona productiva y será de gran beneficio”. Recordó se encuentra en la etapa final y la comunidad espera que en breve pueda habilitarse.
En el lugar existe una alcantarilla con caños de hormigón que resultan insuficientes cuando el caudal de agua de arroyo sube repentinamente, lo que provoca el desborde del cauce y socava la calzada en los días de precipitaciones intensas.
“Teníamos muchos inconvenientes cuando llovía por suerte ya falta poco para que culmine la parte superior del puente. Estas obras son soluciones que permiten incrementar las posibilidades de desarrollo y la calidad de vida de nuestra comunidad”, aseguró el jefe comunal.
Mientras, los productores continúan con sus actividades. El municipio también contará con una sala de acopio, fraccionamiento y envases de azúcar. El proyecto se desarrolla a través del Ministerio de Industria y se estima que en 2023 comenzaría a funcionar. Tanto esta iniciativa como el puente “traerá beneficios a Mojón Grande”, remarcó el intendente.
