La Unión Cívica Radical (UCR) enfrenta un complejo panoramal en 2025, donde pondrá en juego cuatro de sus trece bancas en el Senado, en el contexto de una renovación parcial que abarca ocho provincias. La crisis electoral de la UCR en el Senado se agudiza por la irrupción de La Libertad Avanza y la fractura interna en Juntos por el Cambio, lo que pone en riesgo su presencia en la Cámara alta.
Las proyecciones no son alentadoras. La UCR viene de perder seis escaños en las elecciones pasadas, y este retroceso amenaza con profundizarse hasta reducir la bancada radical a tan solo nueve miembros. Las elecciones de medio término decidirán el destino de 24 escaños en distritos como Capital Federal, Chaco, Entre Ríos, Tierra del Fuego, Santiago del Estero, Salta, Neuquén y Río Negro, donde los desafíos son múltiples.
Los casos críticos en las provincias
En Entre Ríos, una alianza entre el Pro y La Libertad Avanza podría desplazar a la UCR al tercer lugar, dejándola fuera del Senado. Este escenario genera incertidumbre sobre la continuidad de la banca que hoy ocupa Stella Maris Olalla.
En Tierra del Fuego, el mandato del senador Pablo Blanco está cerca de expirar, y los libertarios, en conjunto con el kirchnerismo, aparecen como principales contendientes en la lucha por los escaños. La falta de una base sólida pone en jaque la posibilidad de revalidar la representación radical.
En la Capital Federal, el panorama es aún más preocupante para Martín Lousteau, quien se enfrenta a encuestas que lo ubican en un lejano quinto lugar, incluso por debajo de la Izquierda. Sin una alianza con el Pro, sus posibilidades de retener su banca son prácticamente nulas.

Por otro lado, en provincias históricamente adversas como Salta, la UCR no ha ganado un escaño en el Senado desde 2001. En Neuquén, el radicalismo no logra reponerse tras la muerte de Horacio “Pechi” Quiroga en 2019, dejando un vacío difícil de llenar en un distrito donde nunca ha consolidado una fuerza electoral estable.
El único caso prometedor: Chaco
En medio de un panorama sombrío, Chaco aparece como una excepción. La victoria de Leandro Zdero como gobernador permite a la UCR soñar con retener la banca de Víctor Zimmermann y, quizás, sumar un segundo escaño. La gestión ordenada del nuevo mandatario contrasta con el caos financiero de la administración anterior, lo que podría jugar a favor del radicalismo en este distrito.
La amenaza de La Libertad Avanza
La creciente influencia de La Libertad Avanza liderada por Javier Milei se erige como uno de los mayores desafíos. En 2021, la fuerza libertaria ingresó al Senado con siete bancas, una cifra cercana a la de la UCR. Aunque la interna oficialista redujo ese número a seis, el avance de los libertarios amenaza con polarizar aún más la escena política y desplazar a los radicales de distritos clave.
Un futuro incierto
La crisis electoral de la UCR en el Senado evidencia las dificultades de un partido sin cohesión interna que se hunde cada vez más en el marco de un escenario político cada vez más fragmentado. Con alianzas tambaleantes, pérdidas históricas de representación y el auge de fuerzas emergentes, el radicalismo enfrenta un 2025 sombrío en materia electoral.