El catedrático Manuel García-Mansilla juró como juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación y se convirtió en el cuarto integrante del tribunal. El acto se realizó un día después de que el presidente Javier Milei lo nombrara en comisión.
Los jueces Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti, presidente, vicepresidente y ministro de la Corte Suprema, encabezaron la ceremonia en el Salón Bermejo del cuarto piso del Palacio de Tribunales. También participó el viceministro de Justicia, Sebastián Amerio, en representación del Poder Ejecutivo.
El pliego del nuevo juez nunca tuvo dictamen en el Senado
Los tres cortesanos decidieron tomar los juramentos antes de que el Senado pudiera abrir el debate sobre las designaciones. Todavía falta oficializar la llegada del juez federal Ariel Lijo, cuya situación resulta más compleja que la de García-Mansilla.
Lijo aún espera que la Corte Suprema le conceda una licencia extraordinaria para sus cargos en la Cámara Federal, donde subroga tres juzgados federales. Según fuentes judiciales, Rosatti y Rosenkrantz no estarían dispuestos a permitirle esa licencia. Si Lijo renuncia a esos cargos, la Corte le tomará juramento.
Desde el Palacio de Tribunales indicaron que el próximo 6 de marzo será una fecha clave. “En el próximo acuerdo se tratará la solicitud de la licencia extraordinaria de Ariel Lijo”, afirmaron.
La Corte Suprema validó el mecanismo de designación que Milei utilizó para nombrar a García-Mansilla y a Lijo. En el acta oficial de la jura se reconoció la forma en que el catedrático de la Universidad Austral accedió al cargo. “Nombrado en comisión, en los términos del artículo 99, inciso 19 de la Constitución Nacional, mediante Decreto del Poder Ejecutivo Nacional (…) como Juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación”, se detalló.
Desde este jueves, la Corte vuelve a tener cuatro miembros. La última modificación en su integración ocurrió cuando Juan Carlos Maqueda se jubiló al cumplir 75 años, el límite de edad para permanecer en el máximo tribunal sin una autorización especial.
Resta cubrir una vacante para que la Corte recupere su conformación de cinco jueces, la cual se mantiene incompleta desde 2021, cuando Elena Highton de Nolasco renunció por razones personales. El entonces presidente Alberto Fernández no presentó candidatos para reemplazarla.
Con el ingreso de García-Mansilla, podría debilitarse la mayoría conformada por Rosatti y Rosenkrantz. Lorenzetti impulsó la designación del catedrático y de Lijo, y busca consolidar su influencia en el tribunal.

Quién es Manuel García-Mansilla
Entre los candidatos propuestos por Milei, García-Mansilla es quien posee un perfil más técnico. El abogado de 53 años, oriundo de Bariloche, Río Negro, se doctoró en la Universidad Austral en 2023 y fue decano de su Facultad de Derecho.
Es cercano al ideario libertario del gobierno, lo que genera previsibilidad sobre sus futuros fallos. A diferencia de Lijo, no tiene un perfil político desarrollado y no realizó gestiones para obtener adhesiones en el Senado.
El kirchnerismo rechazó su candidatura por su postura sobre la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, lo que llevó a que lo catalogaran como un perfil conservador en lo social.
Además de su trayectoria académica, García-Mansilla ocupó cargos en empresas y estudios jurídicos vinculados al sector hidrocarburífero. Fue miembro del directorio ejecutivo de la Cámara de Exploración y Producción de Hidrocarburos (CEPH) y trabajó en los estudios Liendo & Asociados y Marval, O’Farrell & Marial, así como en las compañías Occidental Argentina y Vintage Oil Argentina.