En la Semana del Prematuro, el Hospital Materno Neonatal de Misiones destaca con casos de superación como el de Marcia y su hija Valentina. La historia de lucha y esperanza de esta familia refleja la importancia de una atención integral y especializada en la provincia.
Un diagnóstico desafiante
A las 23 semanas de embarazo, Marcia recibió la noticia que cambiaría su vida. Los estudios confirmaron que su hija Valentina padecía anemia fetal severa, un diagnóstico que ponía en riesgo su vida. Con un sistema de salud preparado para la complejidad de estos casos, el Hospital Materno Neonatal asumió el desafío de estabilizar la situación. “Cada transfusión era un suspiro de alivio”, recuerda Marcia, quien fue sometida a un tratamiento con transfusiones intrauterinas para darle a su hija una oportunidad de sobrevivir.
Durante semanas, un equipo interdisciplinario de médicos y técnicos utilizó tecnología de vanguardia para realizar transfusiones a través del cordón umbilical de Valentina, un proceso guiado minuciosamente por ecografías de alta precisión. Esta intervención requiere no solo tecnología avanzada, sino también la coordinación entre diversos servicios, como el Banco de Sangre y la unidad de neonatología. Este equipo, liderado por especialistas como la doctora Manuela Goizueta Estevanez y la ginecóloga Andrea Canteros Leyes, mostró la capacidad del hospital para atender con éxito situaciones de alta complejidad y salvar vidas.
Nació Valentina, una pequeña guerrera
Finalmente, a las 35 semanas de gestación, Valentina llegó al mundo antes de lo esperado, pero con el respaldo de todo el equipo del Hospital. A pesar de haber nacido prematura, contaba con un dispositivo de neonatología preparado para ofrecerle un ambiente seguro y controlado. “Cada día en la incubadora era un logro”, cuenta Marcia sobre esos primeros días críticos.
Gracias a la tecnología disponible, como incubadoras con soporte respiratorio y un monitoreo constante de sus signos vitales, Valentina pudo recuperarse en un ambiente que cuidaba de cada detalle. En esos momentos, Marcia encontró un apoyo constante en el equipo de profesionales que la ayudaron a superar sus miedos y le brindaron el soporte emocional necesario para afrontar cada paso del proceso.
Un mensaje de esperanza para otras familias
Hoy, Marcia y Valentina están en casa, disfrutando cada día juntas y creciendo en familia. Su historia se convirtió en un símbolo de esperanza para otras familias que enfrentan nacimientos prematuros y en un testimonio del compromiso del sistema de salud de Misiones. La experiencia de Marcia resalta la importancia de contar con un hospital que no solo brinda atención médica avanzada, sino también un acompañamiento emocional esencial.
En esta Semana del Prematuro, este tipo de situaciones críticas, destaca el impacto de una atención integral y de calidad en los resultados de salud de los bebés prematuros y sus familias. Estas historias visibilizan el trabajo que el Hospital Materno Neonatal realiza a diario, salvando vidas y ofreciendo esperanza a las familias misioneras.
*Fotos: Marcos Otaño
