Es un término que designa a uno de los integrantes de la pareja que siente “ ser el segundo plato” de una relación.
Si estás “en la banca”, de reemplazo o directamente frizado, se trata de una “tendencia” que consiste en mantener una conversación y/o coqueteo constante con alguien de nuestro interés, pero sin llegar a concretar algo serio, en estos casos la persona que queda “congelada”, sufre y no encuentra, muchas veces, como salir de ese lugar incómodo.
Ya sea por terceras personas u otros motivos, resulta muy complicado avanzar en la relación con ciertas personas. Incluso, puede que alguno se sorprenda con la idea de una relación abierta.
En tiempos de relaciones líquidas, donde la tecnología y la vida acelerada son parte del día a día, hacen cada vez más difícil llevar adelante una relación y ni pensar en algún tipo de compromiso. Con la aparición de las redes sociales, un foco de infidelidades y desconfianza rondan en relaciones sumamente frágiles.
G. V
