Cientos de personas se acercaron al Cementerio La Piedad a honrar la memoria de sus seres queridos. El 2 de noviembre de cada año, distintas culturas celebran el día de muertos, en cuanto la religión católica conmemora el día de los fieles difuntos.
Cada 2 de noviembre se conmemora el Día de los Muertos. Este jueves, cientos de personas visitaron especialmente al Cementerio La Piedad de Posadas a pedir por el descanso en paz y honrar su memoria.
El cementerio La Piedad, ubicado sobre la Av. Almirante Brown de Posadas, desde temprano comenzó a recibir visitas. El día de los fieles difuntos es una fecha especial en el lugar. Las personas llegan con flores en mano, encienden velas sobre la sepultura de sus seres que dejaron el mundo terrenal. Algunas familias, sentadas en sillones, con mate y alguna comida para acompañar el momento, recuerdan en silencio a sus familiares difuntos.
“Vengo a prender una velita para mis familiares aunque no están sepultados aquí”, contó Clara, sentada sola frente al velario de La Piedad. Además, explicó que si bien hoy es una fecha especial suele ir al cementerio a rezar y recordar a sus seres queridos.
“Siempre se piensa en los seres queridos que ya no están y hoy especialmente, por eso vengo a estar un rato cerca de mi mamá y mi papá que partieron, rezo y les pido que nos sigan cuidando a todos”, relató Beatriz.
Gladys llegó al cementerio con un ramo de flores amarillas, acompañada de su esposo y su hijo. En diálogo con Canal 12 contó que fue a visitar a su mamá, que falleció hace pocos días y a quien le encantaban las flores. “Es un día muy importante, qué mejor recuerdo que venir a verla” expresó. Y agregó que si bien en “este momento tengo un pesar y quiero estar cerca de ella, ella amaba todas las flores, tenía un jardín hermoso, de a poco iré plantándole flores en su tumba, como ella hubiera querido”.
Entre las personas que rodean y caminan entre las sepulturas, se ve a hombres vestidos con túnicas blancas. Los diáconos de la Iglesia San Antonio realizan la tarea de acompañamiento en el cementerio. Para aquellas personas que necesitan una palabra de contención, estos jóvenes seminaristas hacen una labor importante. “Llevan un mensaje de ánimo, sostienen en momentos de angustia y dolor, acompañan tanto a fieles como a no creyentes, para que logren aceptar la partida de las almas”, explicó Antonio Ramírez.
Con sillones plegables, bajo un árbol y al costado de una tumba, Bety y Marcelo conversan bajito. Tienen mate y una bandeja con bizcochuelo, la escena parece un picnic. Ambos están allí, por el día de muertos, recordando a sus padres difuntos. Marcelo se emociona al contar que su mamá murió hace 8 meses, con los ojos llenos de lágrimas expresó “todavía duele”. Bety, más entera, señaló que los padres de ambos murieron y suelen ir al cementerio, pero “hoy venimos especialmente por el día de los muertos”. Durante su visita, la mujer aprovecha para hablarle a su papá, “le cuento cómo estamos, si pasó algo lindo en la familia, trato de recordarle bien y decirle que le quiero”, contó.
Imagen de portada: Sixto Fariña
