Una reconocida heladería de la provincia incorporó sorbetes compostables que se degradan en 180 días. A diferencia de los tradicionales de plástico, que tardan más de 200 años en descomponerse.
Los sorbetes biodegradables están hechos completamente de almidón de maíz. Son productos que una vez utilizados no se descartan como basura ni como reciclable, sino que pueden descomponerse en la tierra. La iniciativa es un claro ejemplo de economía circular, donde los residuos que se generan son devueltos al suelo en forma de nutrientes.
Lucas Sánchez, supervisor del local ubicado en Córdoba y Junín de la capital provincial, destacó que la heladería “hace tiempo que viene buscando insumos amigables con el medio ambiente”.
Este innovador producto, para el consumo de batidos, puede convertirse en fertilizante orgánico. La decisión de la cadena local apunta a reducir los plásticos de un solo uso, como los sorbetes descartables.
“Antes usábamos sorbetes de plásticos, pasamos a los de polipapel y ahora incorporamos sorbetes hechos 100% con almidón de maíz”, señaló el heladero.
La tradicional heladería trabaja también con potes de polipapel, que reemplazan a los vasitos de Telgopor.
Los sorbetes de almidón de maíz ya se utilizan en todos los locales que ofrecen batidos, ubicados en el centro posadeño y en la sucursal de Concepción de la Sierra.
“La gente lo recibe muy bien”, señaló Sánchez y comentó que los clientes también proponen acciones para el cuidado ambiental. “Los misioneros apoyan mucho estas causas” finalizó.
