Su nombre es Heriberto Silvero de 77 años y se instaló en la zona hace 50 años. Hoy ya jubilado disfruta de la vida en una ciudad que no para de crecer.
Transitó las dos etapas de la historia de Pozo Azul. Toda su vida se dedicó al cultivo en la chacra. Vive con su esposa e hijos y recordó como era el municipio antes de su independencia en el 2017. “De lo que era antes a lo que es hoy, Pozo Azul cambió bastante. Llegué hace 50 años desde Paraje Mondorí situada a 7 km de la ciudad, ahora es todo ruta pero antes era solamente tierra y monte”, contó a Canal 12 Heriberto Silvero.
El colono es un pionero del municipio. Se jubiló hace un tiempo atrás, en el presente vive la vida de una manera distinta. “Ahora disfruto más con mi familia, tengo más tiempo libre para hacer otras cosas cotidianas, trabajé toda mi vida, primero en un aserradero y luego en los cultivos en la chacra, sembraba de todo un poco pero en esta zona el tabaco pisa fuerte”, indicó.
La localidad está compuesta por aproximadamente 9 mil habitantes. Fue creada el 12 de octubre de 2017, cuando se sancionó la Ley XVI 1. Además, un puñado de vecinos construyeron la primera Escuela y la primera Iglesia, eligiendo al santo patrono de la localidad: San Ramón Nonato.
Una ciudad impulsada por el crecimiento
En el acto por el aniversario por los cinco años, el Intendente Pozoazuleño, Edgar González, hizo mención a la traza urbana, indicando que la empresa encargada de la obra ya esta en situada allí, y que esta comenzará a trabajar en el corto plazo. Entre otras cuestiones, mencionó también un convenio con Bomberos Voluntarios de 9 de Julio, para la formación de un Cuerpo en el municipio.
El sueño hecho realidad
Un 17 de septiembre del 2000, Pozo Azul y los Parajes Aledaños, se pusieron de pie y comenzaron a transitar un duro y largo camino en favor de la consolidación de un territorio municipal. El 8 de enero del 2007, luego de las determinaciones de las superficies efectivamente ocupadas, se da inicio a las mensuras, por parte de la Subsecretaria de Tierras y Colonización. El objetivo era materializar de forma catastral los grandes bloques territoriales de las 38.000 hectáreas a ser expropiadas en la zona Pozo Azul y Áreas aledañas.
