Ocurrió en Apostóles. En un móvil de la Comisaría de la Mujer la oficial Ana Medina reanimó a un recién nacido. El pequeño Julian era trasladado de urgencia al centro asistencial. El padre del bebé pidió auxilio a los efectivos que cumplían sus funciones en una plaza apostoleña.
Una de las peores pesadillas le ocurrió a una familia apostoleña cuando alimentaban al pequeño Julian en su casa. El niño de apenas 16 días de vida tomaba la leche cuando se ahogó. En ese momento sus padres subieron al auto con el bebé en brazos y pararon al ver una patrulla emplazada la plaza Los Tubos. Fueron socorridos por el móvil de la Comisaría de la Mujer, y de camino al hospital, una oficial practicó RCP al pequeño lo que le salvó la vida.
Ayer jueves, alrededor de las 20 horas, un padre desesperado con su bebé en brazos fue hasta el móvil policial que estaba apostado en la plaza apostoleña. El papá pidió auxilio a los policias ante el cuadro de su hijito que se habría descompensado imprevistamente en su domicilio, tras tomar la leche.
Inmediatamente los policías resguardaron al bebé y salieron camino al hospital local. En el trayecto, la oficial Ana Belén Medina notó que el niño dejó de respirar e inmediatamente comenzó con maniobras de Reanimacion Cardiopulmonar.
En cuestión de segundos el menor volvió a respirar y en esas condiciones fue ingresado al nosocomio donde fue atendido por los médicos.
En el trancurso de esta mañana, el bebé llamado Julián presentó una alentadora mejoría y fue dado de alta en compañía de su mamá.
Un gabinete interdisciplinario de la Unidad Regional 7 de Apóstoles acompaña a la familia y seguirá de cerca el estado diario del menor, por el lapso de las próximas 72 horas.
