Juan Marenco, autor de Cultura de la Influencia, habló en diálogo con Canal 12 sobre la cultura digital. La sociedad de la exposición, los límites de la privacidad y la propuesta en crecimiento de TikTok y Twitch, entre los temas que abordó.
Por Adriana Vargas
El CEO de Be Influencers, Juan Marenco, visitó Posadas y en un reportaje con El Doce habló sobre los contenidos en las redes sociales y cómo construir una marca personal que sea creativa, consistente, constante y confiable. Docente universitario, estratega y analista de cultura digital, también reflexionó sobre el rol de los influencers y el poder que tienen sobre las marcas e incluso en la política.
El empresario y coautor del ensayo Cultura de la Influencia. La fuerza suave que está moldeando una nueva sociedad, trabajo conjunto con Tomás Balmaceda y Miriam De Paoli, advirtió también que “la privacidad está en crisis”. En Internet, la privacidad de los usuarios queda expuesta, por lo que recomendó tomar ciertos recaudos a la hora de publicar información, cualquiera sea ésta.
Según Marenco, hoy en día también es difícil mantener la privacidad, ya sea porque la gente se involucra en exponer al otro, o porque los propios algoritmos se nutren de nuestra base de datos. Y aseguró que “vivimos en la sociedad de la exposición”.
“Todo el tiempo estamos siendo filmados por un celular, y las personas están expuestas, ya sea cuando van a un recital o están en la vía pública. Siempre tienen un dispositivo que les saca fotos, en cualquier momento”.
Juan Marenco – CEO de Be Influencers
Exposición y cancelación
Ante la pregunta que muchos se hacen “¿Qué es la cancelación?”, el especialista en redes sociales explicó que alguien “cancela” cuando se encuentra con una opinión o pensamiento que no comparte o está en desacuerdo, entonces “ataca” a las cuentas particulares o de grandes firmas que visibilizan o guardan alguna relación o interés con dicha opinión. Ejemplos abundan sobre este fenómeno.
Marenco relacionó la cultura de cancelación con eso de estar “todo el tiempo siendo filmados por un celular”, y las personas están expuestas, ya sea cuando van a un recital o están en la vía pública, “siempre tienen un dispositivo que les saca fotos, en cualquier momento”. Al permanecer bajo la lupa durante tanto tiempo, la gente se arriesga a “el peor mal de nuestra época: la cancelación”.
Según el autor, “la cancelación es algo que pasa todo el tiempo y de forma explícita. Buscan el historial de la persona hasta encontrar registros sobre cómo pensaba antes”, enfatiza, y agrega: “es una locura”. Sin embargo, “el chiste está en que si todos somos cancelados, al final nadie es cancelado”, lo cual sucede también en la dinámica de las redes sociales.
Nuevas plataformas, nuevas reglas
También dialogó sobre las herramientas que ofrecen determinadas redes sociales, sobre todo Twitch y TikTok, ambas plataformas emergentes y en constante crecimiento. Fundada en 2016, TikTok cuenta hoy en día con mil millones de usuarios. Se trata de una plataforma en la que los usuarios comparten videos de entre 3 y 60 segundos, además de ciertas particularidades que la hacen única.
TikTok ofrece un paquete de contenidos que hasta el momento no existía: desafíos, sincronización de labios, bailes, videos divertidos y trucos de magia. Y, además, permite compartir efectos de sonido y reacciones; emojis y efectos especiales; reacciones en video y funciones interactivas que la hacen atractiva, grotesca e incluso bizarra.
Mientras que en Instagram prioriza contenido idealizado y aspiracional. La propuesta en TikTok es más auténtica y cercana a la vida cotidiana, incluso más asociada a la espontaneidad o la autenticidad, características que comparte con Twitch, la plataforma norteamericana para realizar transmisiones en vivo.
