La actriz, acompañada por su pareja Eduardo Cruz y su hijo Cairo, visitaron los lugares más significativos de su niñez en Buenos Aires. En un video conmovedor, Eva de Dominici se reencontró con su familia y rememoró momentos inolvidables.
Eva de Dominici, radicada en Estados Unidos desde hace varios años, aprovechó su última visita a Buenos Aires para volver a los lugares que marcaron su infancia. Acompañada por su pareja, Eduardo Cruz, y su hijo Cairo, recorrió Villa Fiorito y Lanús, los barrios donde creció. La actriz documentó este nostálgico viaje en un video que compartió en sus redes sociales, mostrando los sitios que la vieron crecer.
Un viaje lleno de recuerdos y emociones
Entre los momentos más emotivos del recorrido, Eva visitó su primera casa y el local donde trabajaba su madre. También se reencontró con su querido primo Christian, quien tiene parálisis cerebral, y su tía Liliana. Juntos revivieron anécdotas familiares mientras revisaban viejas fotos y disfrutaban de un asado en familia.
El recorrido no solo incluyó paradas en casas familiares, sino también en lugares importantes para su comunidad. Eva visitó el Club Social Cultural y Deportivo Sud América, donde pasó gran parte de su infancia. Allí, se reunió con su padre, quien sigue trabajando en el club, y con su antigua profesora de patín artístico. El reencuentro fue muy emotivo, y el club destacó su visita a través de sus redes sociales, recordando la profunda conexión de la actriz con el lugar.
La visita también incluyó una cena en un restaurante de Buenos Aires y un paseo por el centro de la ciudad, donde Eva compartió momentos especiales con su familia.
El impacto de su visita en redes sociales
La visita de Eva de Dominici a sus raíces no pasó desapercibida en redes. La fotógrafa Cony La Greca, quien documentó el viaje, expresó su gratitud por haber sido parte de este recorrido tan especial, elogiando a la actriz y su familia por su calidez y cercanía. La actriz también compartió en sus redes su agradecimiento hacia Graciela De Rosa, su primera profesora de teatro, a quien visitó en el Centro Cultural San Martín.
Con emotivas palabras, Eva recordó cómo su pasión por la actuación comenzó en esas aulas a los ocho años, un momento que, según ella, transformó su vida. La conexión con sus raíces, su familia y su comunidad sigue siendo un pilar en la vida de la actriz, a pesar de la distancia.
Este viaje a su pasado reafirmó la importancia de sus orígenes en su vida actual y cómo, a través de sus recuerdos, Eva sigue conectada con el lugar donde amó la vida.
